Wednesday, May 29, 2013

Hoy hace 561 años…



A lo largo de la historia a Estambul (la antigua Constantinopla) la trataron de conquistar 29 veces. ¿Por qué tantas veces, quisieron tener el poder de esta ciudad? La razón más importante de esto es, por supuesto, su ubicación
estratégica entre Asia y Europa. Estambul ha sido bendecida como un puente natural, ubicada en el centro del mundo que une a estos dos continentes. Para los musulmanes era otra razón más importante  que la ubicación de la ciudad; era sin duda las palabras que había pronunciado el profeta Mohamed sobre la conquista  de Constantinopla.  En sus palabras La conquista de Constantinopla sin duda será un día. ¡Qué gran jefe, el comandante que lo conquistara y lo hermoso de sus soldados”. Por esta razón, los otomanos trataron 4 veces, y otros países árabes trataron  3 veces, de conquistar a esta estratégica ciudad.



En pleno siglo XV, Constantinopla, era parte del imperio Bizantino, paradójicamente rodeada dentro del Imperio Otomano y  aun no conquistada por los otomanos. Vivía su esplendor, como una ciudad prospera en comercio y cultura; para los otomanos era necesario conquistarla y convertirla en la capital de su Imperio. El primer intento se hizo durante el periodo del Sultán; Yıldırım Bayezid, quien no pudo conquistar pero si demostró que se podía y le dio fuerzas e ideas a otros sultanes para organizarse militarmente en la toma de Constantinopla. Solo después de dos décadas, que presidieron a Yıldırım Bayezid, fue que se dio la toma de Constantinopla. El protagonista fue el Sultán Mehmet II, su bisnieto,  quien vio la urgencia de que Constantinopla debía ser ya la capital del Imperio. No era simplemente una ciudad prospera, si no que también se había convertido en el centro da la iglesia Ortodoxa, convirtiéndose en un lastre alrededor del cuello del Imperio Otomano y bloqueando su camino para el progreso.



El Sultán Mehmed II, sabía que para poder conquistar debía trabajar en todos los frentes. Primero que todo Constantinopla, era una ciudad muy protegida. Sus murallas datan del siglo V y tenían una extensión de 22 km, de las cuales a lo largo de la historia se han restaurado y reconstruido 4 veces. Los muros en tierra que protegían estaban compuesto de tres partes: la pared exterior, la fosa y la pared interior. Paredes laterales al mar se extendían a lo largo del paseo marítimo para proteger la ciudad del ataque de una flota naval. Además, en la entrada del Cuerno de Oro (El Cuerno de Oroen turcoHaliç; es una histórica desembocadura del estrecho del Bósforo, que divide la ciudad turca de Estambul), existía fuertes cadenas de metal, que  impedían la entrada de los buques no deseados. Segundo, Mehmet II tenia que lidiar con las ayudas que recibía Constantinopla de otras partes de Europa.



Mehmed II sabía que los asedios anteriores habían fracasado porque la ciudad recibía suministros a través del mar y entonces trató de bloquear las dos entradas, la del mar Negro, con una fortaleza armada con tres cañones (Rumeli Hisarı, construida alrededor del Castillo de Anatolia, construido por su bisabuelo Bayezid) en el punto más estrecho de la orilla del Bósforo, y con al  menos 125 navíos ocupando el estrecho de los Dardanelos, el mar de Mármara y el oeste del Bósforo. Adicionalmente, Mehmed II mando a fabricar un inmenso cañón de nueve metros de longitud, llamado el cañón Mortero. El cual nunca se había visto; convirtiéndolo en el más fuerte del mundo para la época. En febrero de 1453, ordenó instalar los  cañones frente a los castillos de Estambul y en  abril de 1453, preparo a su ejército para la toma de Estambul  con 150.000 a 200.000 soldados.



Después de completar los preparativos, Mehmed II envió a su embajador ante el rey bizantino y le pidió la ciudad de Constantinopla, para que fuera entregada al Imperio Otomano.  Tras la negativa, el asedio de Estambul comenzó el 6 de abril 1453. El ejército otomano sitio a la ciudad por tierra y mar. El ejército comenzó hacer sus incursiones por  las murallas de la ciudad, pero los bizantinos no  permitieron que los otomanos entraran.  La armada naviera tampoco pudo entrar ya que los barcos genoveses y venecianos que llegaron ayudar, los bloqueaban. Tampoco lo pudieron hacer por el Cuerno de Oro ya que las grandes cadenas de metal impedían que estos llegaran a tierra.



En la noche de abril 21, el sultán imposibilitado para atravesar la cadena que cerraba el Cuerno de Oro, ordenó la construcción de un camino de rodadura al norte de Pera, por donde sus navíos podrían ser empujados por tierra, evitando la barrera. Con los navíos posicionados en un nuevo frente, los bizantinos no tendrían recursos para reparar después sus murallas. Cabe señalar que esta estrategia  fue realizada por primera vez por Mehmed II. Aunque este es un evento muy importante dentro de la conquista, los bizantinos se vieron forzados a contratacar y el 23 de abril intentaron un ataque sorpresa a los turcos en el Cuerno de Oro, pero fueron descubiertos por espías y ejecutados. Todo el mundo estaba en una gran confusión y los bizantinos entraron en una gran desesperación, decapitando a 260 turcos cautivos y arrojando sus cuerpos sobre las murallas del puerto.



Durante la madrugada del día 29 de mayo de 1453, el sultán Otomano Mehmed II lanzó un ataque total a las murallas. Ya los bizantinos, agotados no podían seguir el ritmo de contrataque; sellando los huecos que habían hecho los otomanos en sus murallas. Al final de la tarde de ese 29 de mayo Constantinopla paso a manos de los otomanos. Se necesitaron 53 días desde que empezó el asedio para que los otomanos tomaran el poder sobre la ciudad.



Así fue como el séptimo sultán del Imperio Otomano después de la conquista de Constantinopla, a la edad de 21 años, se hizo conocido como Fatih (el Conquistador) Sultan Mehmed. Los tres primeros días después de la conquista, Estambul era un torbellino. Fue solo hasta el tercer día que la ciudad se calmo. Después de todo este caos, la conquista comenzó a celebrase  con grandes festividades. Fatih Sultan Mehmed prohibió la circulación de sus soldados en la ciudad con el fin de evitar daños después de las fiestas. Rápidamente la ciudad se puso en control. Se anuncio a los griegos, a la comunidad judía y armenia vivir sus tradiciones y su religión libremente en Estambul.

El Sultán Fatih Mehmed ordenó a los griegos ortodoxos libres de elegir un patriarca,  concedió el derecho de tener una sinagoga a la comunidad judía y un patriarca para la comunidad de armenios.

La conquista de Estambul, a finales de la Edad Media fue el inicio de la Nueva Era. Por lo tanto, Fatih, "el monarca revolucionario", como  ha sido reconocido;  con su conquista a Estambul dio termino con 1.000 años de antigüedad del Imperio Romano de Oriente (bizantino).



La ciudad fue declarada cuarta capital del Imperio Otomano, yKostantiniyyese utilizo como el nombre oficial de la ciudad por el Imperio Otomano, y hasta la caída de este Imperio en 1923, el nombre se mantuvo en uso la mayor parte del tiempo.



Aunque el nombre de Estambul no era el nombre oficial, en el período otomano, se utilizo en muchos documentos oficiales.  Fue renombrada oficialmente como Estambul (su nombre actual) el 28 de marzo de  1930 mediante la Ley Turca de Servicio Postal, parte de las reformas nacionales impulsadas por Atatürk.



Aunque desde 1923 la capital de Turquía es Ankara, Estambul sigue siendo  la ciudad más grande de Turquía, constituye el corazón económico, cultural e histórico del país. Cuenta con una población de 15 millones de habitantes, la ciudad constituye una de las mayores aglomeraciones urbanas de Europa y se encuentra entre las ciudades más grandes  y hermosas del mundo. Tiene una extensa área de 5.343 kilómetros, es también la capital administrativa de la provincia de Estambul (de la que cubre 27 distritos) en la llamada Rumelia o Tracia Oriental.



En los últimos 561 años, a pesar de los acontecimientos mundiales más importantes del mundo, Estambul seguirá siendo uno de los centros culturales y comerciales del mundo. Hoy en día, 30 millones de turistas vienen a Estambul, por diversas razones, y todos regresan a sus países influenciados por lo que ven y viven en esta ciudad.  Estambul es candidata para los Juegos Olímpicos 2020, si es seleccionada lo mas seguro es que los visitantes podrán esperar experiencias jamás vivida en la ciudad que ha sido las mas apetecida para ser conquistada.